Portugal es tierra de vinos ancestrales, tradicionales y también de vinos únicos. Pero no todo es Dao, Douro, Porto, Madeira o Vinhos Verdes.
A pesar de ser bastante desconocidos y de estar a la sombra de
países como Francia, Italia o España, parece que Portugal siempre tiene alguna que otra sorpresa reservada, como es el caso del proyecto de Pinga Amores, que se presenta a continuación.El vino:
Su terruño de origen es la región alentejana de Portalegre, Portugal. El Pinga Amores 2007 tiene una producción de aproximadamente 8000 botellas. Este vino está calificado como "Vinho de mesa" pues todo el proceso de vinificación de esta primera añada está hecho en las bodegas del Enologo a cargo, en la región del Duero. La cosecha 2008 ya será "DO Alentejo".
El viñedo:
Se trata de un pequeño viñedo de 6,9 hectareas orientado a sur-suroeste, a unos 600 metros de altitud. Las parcelas fueron plantadas entre 2001 y 2004 combinando variedades (llamadas castas localmente) internacionales como Syrah, Cabernet Sauvignon y Alicante Bouschet y portuguesas nobles como Touriga Nacional, Aragonés (tempranillo) y Trincadeira.
Vinificación:
El prestigioso Celso Pereira es el enólogo responsable del proyecto. Su Vértice Tinto es uno de los vinos más destacables de Portugal.
La fermentación del Pinga Amores se desarrolla a temperatura contrrolada en cubas de inox, durante un período de 6 a 10 días. Acabado el proceso, los vinos son trasegados a barricas de roble francés (Nevers, Vosgues y Allier) de 225 litros, donde toma lugar la fermentación maloláctica y permanecen en crianza hasta 21 meses.
Nota de Cata (Ricardo Medina, Sommelier).
Vino tinto de color picota y gran profundidad. Primeras impresiones agradables de equilibrada madurez y algo de sol en sus sensaciones térmicas. Desprende, poco a poco, un abanico de matices maduros de jaleas, fruta en licor y algo de bosque, como el romero, todo sobre un fondo terroso. Cabe destacar su persistente intensidad aromática. En la boca es amplio, carnoso y con excelente amalgama. Es cálido pero de buena vivacidad y longitud.
El Pinga Amores 2007 es un vino que, por su finura y personalidad, genera sensaciones y recuerdos muy agradables que realzan la ocación.
Muy buen complemento para quesos semicurados de oveja, chuletones a la brasa con sal marina, y cordero al horno, por ejemplo. Aunque como aperitivo, con una selección de buenos embutidos y buen aciete de oliva en pan casero, será remarcable.
Salud.
